Una de las cosas que me gusta visitar en cada ciudad a la que voy es el mercado de abastos. Son lugares donde huele a fruta y verdura de verdad, a comida generalmente de calidad mejor que la de cualquier supermercado.
En Santa Cruz, el mercado de Nuestra Señora de África es uno de los lugares más conocidos de la capital. Se encuentra en un edificio colonial que hace juego con el aire pintoresco de la ciudad.
Entre sus establecimientos hay heladerías, fruterías, carnicerías, bares, etc. Las 2 cosas que me llamaron más la atención fueron algunas de las frutas tropicales que solo antes había visto en países tropicales, como la fruta del dragón (una fruta de color fucsia con una especie de hojas verdes, que es súper bonita); y algunos puestecillos con comida típica de sudamérica como: empanadas o tequeños (unos rollitos de una pasta similar al hojaldre rellenos de queso).
Son pequeños detalles que me recordaron a un mercado que visité al sur de Miami y que era súper latino, con comida mexicana, food trucks, frutas de todas las clases y hasta una orquesta tocando cumbias. Por eso, como siempre digo, Tenerife y sus latin vibes.
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